El cáncer de tiroides se caracteriza por un sobrecrecimiento celular a nivel de la glándula tiroidea, productora de las hormonas tiroideas. Podemos distinguir diferentes tipos de cáncer dentro del tiroideo:
- Cánceres de
tiroides diferenciados. Las células
cancerosas son similares a las del tejido normal y se originan a partir de las
células foliculares tiroideas. A su vez, se distinguen en:
-
Cáncer papilar: representa el 80%
de los cánceres tiroideos. Son de crecimiento lento, pero suelen propagarse a
los ganglios linfáticos. Sin embargo, suelen tener buen pronóstico.
-
Cáncer folicular: representa el
10% de los cánceres tiroideos. Es común de las dietas bajas en yodo y no suelen
diseminar a los ganglios linfáticos, pero si a otros órganos. Por ello, el
pronóstico es peor con respecto al cáncer papilar.
-
Cáncer de células Hürtle o células
oxífilas: 3% de los cánceres tiroideos.
- Cáncer de tiroides medular. Representa el 4% de los cánceres tiroideos. Se origina en las células C de la tiroides y puede propagarse a los ganglios linfáticos, los pulmones o el hígado incluso antes de detectarse un nódulo en la glándula. Se distinguen en MTC esporádico (80%, no hereditario) y MTC familiar (20%, hereditario).
- Cáncer de tiroides anaplásico. Representa alrededor del 2% de los cánceres tiroideos, posiblemente a causa de un cáncer papilar o folicular previo. En este caso, las células cancerígenas difieren bastante en cuanto al tejido normal. Se disemina con rapidez y no tiene buen pronóstico.
Signos y síntomas
En general, el cáncer de tiroides
no suele presentar manifestaciones tempranas. Sin embargo, a medida que se
disemina, pueden aparecer diferentes signos y síntomas tales como:
- Nódulos tiroideos
- Cambios en la voz
- Ronquera
- Disfagia
- Disnea
- Inflamación de los ganglios del
cuello
- Dolor en el cuello y en la
garganta
Factores de riesgo
Dentro de los posibles fatores que
puedan incrementar el riesgo de padecer cáncer de tiroides, encontramos:
- Afecciones hereditarias
relacionadas con la tiroides
- Antecedentes familiares
- Radiación
- Sobrepeso y obesidad
- Ingestas escasas o excesivas de
yodo
Diagnóstico
Para la detección de un cáncer de
tiroides, se comenzará por evaluar los signos y síntomas que refiere el
paciente. Posteriormente, y mediante pruebas complementarias, se realizará el
diagnóstico final:
- Ecografía. Determinará la
composición de los nódulos tiroideos, de haberlos, así como su tamaño y número.
Además, determinará la posible afección de los ganglios del cuello y ayudará en
la realización de una biopsia guiando la aguja para la toma de muestras.
- Gammagrafías con yodo radiactivo.
Se utiliza para determinar la presencia de un cáncer de tiroides o, de ya estar
diagnosticado, estudiar la propagación del mismo.
- Radiografía de tórax
- Tomografía computarizada. Ayuda en
la localización y tamaño del tumor y en el estudio de una posible diseminación
del mismo.
- Biopsia. Diagnóstico definitivo
mediante aspiración con aguja fina (FNA) del nódulo tiroideo para determinación
de células cancerosas.
Bibliografía
- https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/thyroid-cancer/symptoms-causes/syc-20354161
- https://www.cancer.org/es/cancer/cancer-de-tiroides/acerca/que-es-cancer-de-tiroides.html
- https://www.cancer.org/es/cancer/cancer-de-tiroides/deteccion-diagnostico-clasificacion-por-etapas/senales-sintomas.html
- https://www.cancer.org/es/cancer/cancer-de-tiroides/deteccion-diagnostico-clasificacion-por-etapas/como-se-diagnostica.html